______NARRAS TÚ______ -Justin, hoy, mientras estaba en internet, vi algo de MY WORLD TOUR, ¿qué es eso? -fruncí el ceño, tenía curiosidad. ''Gotta change my answering machine, now that I'm alone, Cuz right now it says that we. Can't come to the phone, and I know it makes no sense, cuz you walked out the door, but it's the only way I hear your voice anymore'' Empezó a sonar el móvil de Justin, lo miré, estaba nervioso, agaché mi mirada. ''Selena'' Suspiré de nuevo, él suspiró también, tragó saliva y respondió con un: -No puedo hablar ahora-dijo y colgó. Volvió a suspirar. -Justin – dije mirándolo con tono de preocupación- no debes hacer eso. -Princesa, no debo de hacer tantas cosas...-dijo, me miró, volvió a suspirar, cambió de marchas y viró su vista a la carretera. No le contesté, no quería estropear el momento, miré a la carretera, la noche hoy se veía realmente preciosa, las estrellas brillaban más que nunca, de repente la luz de un coche destalló sobre mis ojos, los cerré instintivamente y su imagen se vino a mi mente, de nuevo él, mi padre. ____FLASHBACK____ -Mi niña, algún día, cuando te hagas mayor y encuentres a tu príncipe te regalaré el más bonito de los trajes, tendrás el más bonito de los castillos y serás las niña más feliz del mundo. ______FIN DEL FLASHBACK_____ Aún sigo esperando que vuelva a entrar por las puertas de mi casa, aún sigo esperando el beso de buenas noches, aún sigo esperando que me haga sentir bien como lo hacía de costumbre, como me abrazaba y como me hacía reír con sus tonterías. -Estamos llegando princesa-dijo poniendo su mano sobre la mía, que recaía sobre el asiento, se aferró a mi mano y la apretó fuertemente. -Aún me sigo haciendo la misma pregunta.-dije mirando por la ventanilla del coche.- ¿Por qué yo? ¿por qué? -Algún día tendrás la respuesta, ahora, cierra los ojos.-dijo mientras sacaba las llaves del coche y rió. -Está bien, pero ten cuidado con lo que haces-carcajeé.-Bajó del coche y cerró la puerta, dio la vuelta y abrió la mía, bajé con cuidado, no tenía ni idea de donde estaba, había árboles y una carretera solitaria, tenía algo de frío y empezaba a darme miedo. Me puse de pie, el no paraba de observarme, miré varias veces a mi alrededor, el observó mi cara y carcajeó. -No va a pasar nada, donde vamos queda cerca.-Me estiré el vestido, me acomodé, volví a mirar a Justin y sonreí. Se acercó a mi y besó mi frente. Se quitó la chaqueta y me la puso por los hombros. -Tardaremos 3 minutos, no es mucho, toma, para que no tengas frío. -No sé si recuerdas, pero contigo iría al fin del mundo.-no sabía porque había dicho eso, tal vez podía haber sonado algo 'cursi' pero realmente pensaba así- y no seas tonto, no hace falta que me des tu chaqueta, te enfermarás. -Shh- se limitó a decir, rodeó mi cintura con su brazo y empezamos a caminar. -¿Dónde encontraste esto? ¿Cómo conoces tantos sitios escondidos? - el carcajeó de nuevo. -Bueno, digamos que el abuelo y yo de pequeños nos gustaba investigar, solíamos venir aquí a cantar y a hacer travesuras de las nuestras.-yo reí, el rió, volví a reír, volvió a reír. -Eres idiota-dije yo, tocando su pelo. -¿Qué me has dicho?-dijo poniendo una sonrisa pícara mientras me miraba. -Idiota- concluí y reí de nuevo. -Tu lo has querido-dijo riendo mientras dio un paso hacia atrás, hizo un gesto raro y no sé como ni porqué ahora estaba justo arriba de sus hombros, pegando puñetazos en su hombro, riendo y dando pequeñas patadas para que me soltase. Pero ni caso, me ignoraba y caminaba, yo en cambio seguí haciendo fuerza, riendo y gritando. Después de unos minutos caminando por aquel oscuro lugar, escuchando el 'crash' de las hojas secas que Justin pisaba dejé de gritar, por un momento el miedo me invadió, y un escalofrío rodeó mi cuerpo. -Justin- dije en un pequeño hilo de voz- tengo miedo.- él volvió a reír.- ¿Me puedes bajar ya de aquí arriba? -¿Miedo? No te va a pasar nada, estás con el macho alfa.-estallé en carcajadas, al igual que él. -Bájame de aquí, me duele la barriga-dije entre carcajadas. Me bajó mientras no paraba de reír. -Así que tú-dije señalándole- eres el macho alfa-dije mientras volví a soltar una carcajada. -Tu lo has dicho nena-dijo guiñándome un ojo, mientras agarraba el dedo con el que le había señalado, tirando de él, haciendo que me encontrase a tan solo 1 centímetro de él.- Sigo pensando que cada día que pasa estás más increíble.-me susurró en el oído, yo cerré los ojos por un momento y de nuevo un escalofrío recorrió mi cuerpo. -Y yo sigo pensando que cada día estás mas sexy- dije susurrándole esta vez yo en el oído, mientras reía silenciosamente. -Pues cuando quieras princesa, date la vuelta y me verás más sexy aún.- no entendía a que se refería, el rió al ver el gesto que hice con la cara, asintió con la cabeza y señaló algo a mi espalda mientras me daba un cálido beso en la mejilla. Pestañeé un par de veces, giré mi vista lentamente, como si se tratase de una película que transcurre a cámara lenta, como cuando alzas un globo al aire y sube tranquilo, sin prisas. Noté su mano en mi cintura, rodeándola con sus brazos, alcé la vista y me di cuenta de que no merecía esto, de que esto era un sueño del que jamás quería despertar, pero esto es mi realidad, esta es mi felicidad, él es mi felicidad. ¿Nunca habéis oído hablar de los cuentos de hadas? En estos momentos, estoy en uno, porque esto no es real, mi vida no es real. Me encuentro en un lago precioso, con velas que lo rodean, haciendo que cada lucecita destelle en el agua e iluminen mis ojos, junto a el lago una mesa con una vela y una rosa, ¿algo mágico verdad? ¿nunca habéis soñado con esto? ¿nunca habéis soñado con la persona perfecta en el momento perfecto? Justin, es de esas personas que todo el mundo desea tener a su lado, es de esas personas que todas las niñas soñamos de pequeñas, pero todas creemos que no existen, todas las niñas pensamos que los príncipes solo están en los cuentos de hadas; y nos equivocamos porque, un príncipe es toda aquella persona que te haga sentir una princesa cuando estás a su lado, un príncipe es aquella personas que te haga sonreír con tan solo una mirada. Analizo todo lentamente, cierro mis ojos; me doy la vuelta y lo abrazo rápidamente, cien millones de sensaciones acaban de invadir todo mi cuerpo. ________NARRA JUSTIN________ No quiero, me niego, ¿qué haré cuando me sienta realmente mal y necesite sus abrazos? ¿Qué haré cuando necesite sus besos y sus sonrisas? ¿Qué haré para poder sonreír sin falsedad? -Te amo-susurra en mi oído, su voz choca con mi oreja y de nuevo un escalofrío recorre cada vena de mi cuerpo. -¿Te gusta?- le digo algo ilusionado. -¿Hablas enserio?-me dice haciendo una mueca rara con los labios, elevando una ceja y tirando de mi camisa acercándome a ella de nuevo para robarme un besito húmedo en los labios.- eres increíble Biebs.-dijo con un tono ¿sensual? -Tú eres increíble-dije escupiendo el tú, dándole un besito en la nariz, acariciando su mejilla. Ella sonrió y volvió a darme la espalda, volvió a observar cada detalle del lago, los chicos habían echo un gran trabajo, esto había quedado precioso. -¿Has preparado todo esto solo para mi?-dijo volviendo a mirarme. -Para ti princesa-dije poniendo mis brazos sobre sus caderas. -Te odio, te odio mucho-dijo aferrándose en mi cuello, mientras me miraba a los ojos. -Yo también te odio-dije dándole un beso en la comisura de sus labios. -Cuando haces eso, me pones nerviosa-dijo soltando una risa nerviosa. Volví a besarla en la comisura de los labios. -Te dije que no lo volvieras a hacer-volvió a carcajear. Lo volví a hacer. -Justin, no hagas eso-dijo carcajeando. Hice caso omiso, le volví a besar en la comisura. Se tensó. -¡Bieber!-rió. Volví a acercarme a ella, pero esta vez la besé, volví a sentir sus labios, a saborearlos, mordió mi labio superior ¿qué pretendía? Porque si está intentando hacer que todo esto sea más difícil lo está consiguiendo, cada minuto que paso a su lado será una eternidad para recuperarlo dentro de dos días. Este beso, serán de los últimos besos que pueda disfrutar de ella, de la única persona que sabe hacerme sentir bien, de la persona a la que amo, de ella, de __(TN)__ Ella sonrió en mis labios y soltó un 'arghs', yo reí también y volví a agarrar sus labios, volviendo a unirlos. Acaricié su espalda, y ella me atrajo más a un a ella, jugó con mi lengua unos segundos para luego, dejar caer mis labios. -¿Quieres cenar princesa?-dije acariciando su mejilla, mientras la miraba a los ojos, mientras me volvía a enredar en su mirada. -Como prefieras príncipe.-reí di un paso y tiré de su mano. Le acomodé la silla para que se pudiera sentar y cuando se sentó la besé en la frente, caminé a mi sitio y me senté. La vela iluminaba sus ojos con un color especial, realmente era increíble, era preciosa. Durante unos segundos no paramos de observarnos. -Justin, ¿no te ha dado la sensación de estar en un cuento de hadas? -Princesa, siempre que estoy contigo estoy en un cuento de hadas.-ella suspiró y desenrolló una servilleta de tela que había justo arriba del plato, la apoyó en sus piernas y sonrió instintivamente. -Siempre quise a un príncipe en mi vida, pero lamentablemente la vida me arrebató todas las ilusiones que de pequeña había juntado, hasta que llegaste tú. -Eres fuerte. -Lo soy gracias a las veces que caí. -Eso es lo importante. -Te quiero. -Te amo. (….....................................) Todo iba perfecto, estamos tumbados sobre una manta que está justo arriba del césped, mirando a las estrellas, como solía hacer con el abuelo, desde que terminamos de cenar no hemos cruzado palabra ¿el por qué? No lo sé, pero sé que con su mirada me bastó para saber todo lo que nos queríamos decir, dentro de unas horas no la tendré a mi lado y todo será mas difícil, nadie se puede hacer una idea de lo mucho que duele, pero sé que ella luchará y estará mejor sin mi. Este es el lado oscuro de la vida de 'Justin Bieber', es asqueroso no permanecer junto a la persona que te hace feliz por las diferencias sociales, por el miedo y por el daño que le puedas causar por ser tú. Porque cuando eres 'famoso' una persona va por ti, persiguiendo tus fallos, intentando hacer que te rindas y caigas, haciendo que intentes abandonar el juego en el que tú eres el jugador. Personas que te hacen daño, causando daño a la persona más importante para ti. Ella estaba acariciando mi barriga, mientras miraba al cielo y se dejaba de caer en mi pecho, la besé en la frente. -No quiero que te vayas nunca.- Creo que algo no va bien dentro de mi, he notado un gran pinchacito en el lado izquierdo de mi pecho, ahora va más ligero, más aún, más. Puedo notar como el gesto de mi cara cambia, y la sonrisa va desapareciendo poco a poco, intento que no me vea, intento parecer más fuerte y le sonrío, me incorporo un poco y le beso en la mejilla. -No está mal empezar con un para siempre, pero los para siempre en la vida, se olvidan, se pisotean y se malgastan. Las palabras se las lleva el viento y los hechos se quedan grabados aquí-dije señalando mi corazón, mientras tragaba saliva- Por eso, yo prefiero decirte que 'siempre te recordaré'. El amor se siente, no se dice ni se grita, recuerdalo princesa. -¿Me haces un favor?-dijo ella, no veía el gesto de su cara, había mirado de nuevo al lago.- No vuelvas a decir esas palabras, cada vez que hablas es para dejarme la mente en blanco, para llevarte todo mi abecedario y no traerlo más, para dejarme sin voz y para dejarme sin cerebro, si te vas, te llevas esto-dijo ahora ella señalando su corazón y de nuevo el mío empezó a ir rápido- así, que prefiero que te lo quedes tú, así, si algún día te vas, no sufrir tanto. Yo ahora, me había quedado sin palabras, ella se levantó y me extendió la mano en señal de que me levantase, me levanté y me acomodé la ropa. Ella caminó en dirección al lago, justo antes de llegar a la orilla desabrochó su vestido y este calló al suelo dejando al descubierto todo su cuerpo, no sabía que pretendía pero me había dejado sin palabras, estaba de espaldas, giró la vista y me miró con una sonrisa. Poco a poco fue introduciéndose en el agua, con un movimiento demasiado prohibido, sus caderas se movían al compás, lástima que no le veía nada, llevaba un pequeño sostén sujetado por delante y unas braguitas un tanto ''sexys''. Me mordí el labio y la volví a mirar, la luna rompía su luz en el agua, haciendo que el pelo de __(TN)__brillara más, se introdujo entera, ahora, cada parte de su cuerpo estaba mojado, sonrió al verme, estaba embobado mirándola. -¿A qué esperas, no te piensas meter?- dijo y rió mientras volvía a echarse agua en la cara. -Allá va tu macho alfa- escuché como carcajeaba mientras jugaba con el agua. Me quité los botones de la camisa, desabroché también el pantalón y los deje caer, quité la camisa entera y corrí al agua. Y justo cuando metí el primer pie, una extraña sensación recorrió todo mi cuerpo y una frase vino a mi cabeza. ''Justin, cuando esta noche de a su fin, todo habrá acabado''
Nunca dejes de luchar, sé fuerte, cuando caigas levántate y plántale cara al mundo, la vida es un camino de piedras y acabas de tropezar con una, recuerda, cuando sientas que nada tiene sentido, cuando sientas que todas tus ilusiones y sueños se han esfumado, mira al frente, ahí estaré yo, para ofrecerte mi mano, para no dejarte caer nunca más.♥
viernes, 25 de noviembre de 2011
Novela ·NEVER GIVE UP· Capitulo 23.
Novela ·NEVER GIVE UP· Capitulo 22.
Capitulo 22 Cerró la puerta con un pequeño portazo, tragué saliva, mi corazón iba muy rápido, más de lo común, cerré los ojos y suspiré de nuevo, caminé hacia el ropero y ensayando una falsa sonrisa, abrí la puert; allí estaba, tan linda como siempre, sentada en suelo de este, con una pequeña sonrisa, dejando caer su cabeza en sus manos. Yo le sonreí, me tendió la mano en señal de que la ayudase a levantar. -¿A qué se refería Selena con lo de tener las cosas preparadas?- dijo ella levantando una ceja. PUM, algo dentro de mí no iba bien, esta situación me estaba matando, me sentía realmente mal. -Nada, ya sabes, cosas de trabajo.-dije y la abracé, así, sin motivo alguno, simplemente porque lo necesitaba, necesitaba abrazarla ahora y siempre, saber que esto no lo haría dentro de unos días hacía que mi cuerpo se destrozara en pedacitos. -Te amo príncipe- CLIC, otra vez esa asquerosa sensación. -Yo más princesa. -¡Justin!- dijo ella alzando la voz un poco. -¿Qué?-dije con los ojos muy abiertos. -¿Qué hora es? Toqué mi bolsillo y me percaté de la presencia de mi móvil, lo saqué y miré la hora. -Las 2 y 24 minutos princesa. -¡Dios!-dijo separándose, llevándose las manos a la cabeza mientras soltaba una leve carcajada- me van a matar, luego te veo príncipe- dijo y me dio un pequeño besito en los labios. Corrió, cerró la puerta y se esfumó, como las estrellas fugaces lo hacen. Me quedé anonado observando la puerta, mientras el ruido del portazo retumbaba en mi oído. Me refregué los ojos, me desperecé un poco y me volví a tirar sobre la cama. Estoy tirado en la cama, pensando en mi vida, mis razones y derivados, y en este justo momento solo quiero gritar, para que todo el mundo se entere de lo mucho que duele, para que todo el mundo entienda que mi vida no es fácil. Estoy sintiendo como poco a poco está desapareciendo, los minutos pasan y con ello, ella también se aleja, poco a poco, se aleja su sonrisa, sus abrazos, sus besos, poco a poco se alegra su voz, ella, y ya, no hay vuelta atrás, esta noche marcará un antes y un después. Cuando tienes algo de tiempo para poder poner en orden en tu vida, aparece ella, para deshacer todo lo que tenías planeado, todo lo que un día quería que ocurriese, pero, no te paras a pensar la magia que le da a tus días, no te paras a pensar que sucederá mañana, no te paras a pensar que cada segundo que pasa, es un segundo junto a ella, y un segundo sin ella, porque quizás mañana, ya, no la tenga a mi lado. Y cuando te das cuenta que ya no hay salida, que tu vida es así, que el mundo es así, que lo que tú creaste se está volviendo contra ti solo tienes ganas de volver al pasado, de volver a sentirla, de volver a sonreirle y decirle que todo está bien. Pero eso es imposible, es imposible volver a decirle que todo está bien, estaría mintiendo, estaría haciendole más daño del que le causaré. Con los ojos cerrados tacto buscando mi móvil, me acomodo y me incorporo, son las 6 de la tarde, perfecto, llevo encerrado en la habitación como unas 4 horas, sin ganas de nada. Decido mandarle un mensaje a __(TN)__. ''Princesa, a las 9 paso a por ti, te amo'' Lo mandé, me levanté sin ganas, y caminé hacia el armario, saqué mi maleta y empecé a meter en ella todo lo que había traído. _____NARRAS TÚ_____ Había quedado con Karol, hacía mucho tiempo que no hablabamos, yo apenas tenía tiempo y ella estaba igual, esta tarde habíamos quedado y así podía a ayudarme a prepararme. Mientras leía artículos sobre Justin en el ordenador, uno de color morado en grande me llamó la atención, Gira MY WORLD TOUR, iba a leerlo, pero mi móvil empezó a sonar. -''Princesa, a las 9 paso a por ti, te amo''- sonreí instintivamente. -''Estaré preparada príncipe, te amo''-enviar. Volví a dejar el móvil sobre la mesa, me dispuse a coger el ordenador a leer aquel artículo cuando llamaron al timbre. Era Karol, tan sonriente como de costumbre, a los segundos de abrir la puerta se abalanzó sobre mí, abrazandome fuertemente. Le conté todo lo que me pasó con Justin. -No tia, haber, un momento, Justin, Justin Bieber, tú, él.- me miró con los ojos muy abiertos- pero haber, Justin Drew, si, tu, él. ¿Qué broma es esta __(TN)__?- Seguía sin pestañear- -No, no es una broma, ¿por qué lo sería?-dije algo ''molesta''. -Ey cielo, no te lo tomes a mal, pero es algo difícil de creer. -Si claro, ¿por qué yo sea una simple limpiadora no se puede enamorar de mi? -__(TN)__, es Justin, Justin Bieber, tiene millones de niñas a sus espaldas. -Eso mismo dije yo, pero lo nuestro es real. -Estás ciega-empezó a reir. -¡No estoy ciega!- dije riendo también.- ¿sabes?-dije mordiendo mi labio inferior, riendo- Esta noche, va a venir a buscarme y me dijo que me pusiera preciosa-dije jugando con la cremallera de mi sudadera, algo nerviosa.-¿Por qué no contestas? -Joder __(TN)__, esto no es fácil de asimilar ¿sabes?-dijo riendo- mi mejor amiga tiene un ''royo'' o como lo quieras llamar con Justin Bieber -dijo resaltando las ultimas dos palabras- ¡y no me lo ha dicho! ¿Pretendes que esté tranquila? ¡Joder! ¡No puedo!- dijo riendo. -Calla tonta, me pones nerviosa.-dije tirándole un cojín a la cara. -¡Ey!-dijo tirándomelo a mi.- ¿Y...besa bien?-dijo riendo pícaramente. -Besa asquerosamente increíble.-dije cogiendo el cojín, tirándome hacia atrás de la cama.- las dos reímos toda la tarde, me sentía muy bien con ella, en poco tiempo se había convertido alguien muy grande para mi, mi mejor amiga, se podría decir. Me contó sus amores y como le iba con todo, comimos tortitas y una vez más la liamos. -Pareces una cerda, ¿pretendes que Bieber te vea así? -Ey, cuidado con las confianzas-dije riendo- Bieber como tu le llamas, es mío-dije señalándola. -Deja de quejarte y ¡báñate!. Voy a tener que hacer una obra de arte para quitarte ese chocolate de las pestañas.-reí y cerré la puerta del baño. Me miré al espejo, era un completo desastre, estaba llena de chocolate por todos lados, reí al verme, me solté la coleta y me quité la ropa. Templé el agua y me sumergí poco a poco en ella, pensando en todo lo que estaba sucediendo últimamente. MY WORLD TOUR, ¿qué será? No sé, pero realmente tenía curiosidad por saberlo. Justin de nuevo se hizo dueño de mi mente, me sentía rara, todo había vuelto a la normalidad, podía decir que era feliz. Mamá también estaba muy contenta, estaba mejorando muchísimo, estoy segura de que alguna persona se había colado en su corazón y todas las flechas apuntaban al doctor, al parecer es muy bueno con ella, la trata muy bien, y eso me encanta, me encanta verla feliz. Los gritos de Karol me despertaron de mi abobamiento. -¡Cochinaaaaaa!-dijo dando golpes en la puerta- solo queda una hora para que tu príncipe te venga a buscar. -¿Enserio?-Abrí mucho los ojos.- ¡Aún no sé que ponerme! -¡Calla y sal ya! ¡las princesas no deben llegar tarde!- rió por lo bajo. -Ya voy cochinita-dije riendo. Me sequé y me cepille el pelo. Me acerqué a la puerta del cuarto, abrí y entré, no eché mucha cuenta, en lo que había sobre la cama, Karol no paraba de reír. -¿Qué sucede?-dije yo frunciendo el ceño. -Mira tu cama.- yo giré mi vista, abrí muchísimo los ojos y la boca, ella reía más, en la cama se encontraba un traje precioso, era negro, largo, con la espalda descubierta, tenía piedras preciosas que caían en el escote hasta la espalda, justo al lado del vestido unos pendientes de color plata, brillantes y precisos, con unos zapatos plateados, precisos, se podría decir que tenía ante mí, el vestido que cualquier mujer podría desear, seguía sin creerlo, ¿de dónde había sacado esto Karol? -Dime que esto no es para mi. -Es para ti-dijo sonriendo.- Lo trajo alguien, con esta tarjeta-dijo entregándome un pequeño sobrecito. Una pequeña lágrima calló sobre mi mejilla, no era de tisteza, todo lo contrario, estaba feliz. ''El vestido más bonito, para la princesa más bonita'' Volví a mirar a Karol, ella me miró sonriendo, mientras asentía. Corrí a ella y la abracé. ______NARRA JUSTIN_______ Le acababa de mandar un vestido precioso a __(TN)__, quiero verla MUY linda esta noche, quiero que sea inolvidable, quiero que me recuerde no como uno más que le rompió el corazón, -una lágrima calló por mi rostro, rápidamente me la limpié,- quiero que me recuerde por los momentos en los que estuvo felices, en los que se sintió bien, quiero que recuerde estos días, como los mejores días de su vida. Soy un egoísta, un egocéntrico, soy un estúpido, un canalla, un idiota pero, quiero que esta noche, la recuerde, quiero que cuando yo no esté para apoyarla, recuerde todos los buenos momentos que pasamos juntos, y que cuando me odie con todas sus fuerzas, cuando me deteste con más fuerzas, me tenga en un pequeño cajoncito de su corazón, tal vez olvidado, pero en su corazón. Tacto el móvil, las 8 y media, me incorporo de la cama, me estiro el traje y camino hacia el cuarto de baño, me lavo la cara y me vuelvo a mirar al espejo, mi cara no es muy alegre, así que esfuerzo una sonrisa, me coloco el pelo y dejo de caer mi chaqueta en el hombro, mientras las sujeto con el dedo índice. Bajo sigilosamente y voy directo al coche, antes de montarme escucho una voz. -¿Dónde vas vestido así?-una corriente de electricidad recorrió todo mi cuerpo, de nuevo, Selena. -¿Desde cuándo tengo que darte explicaciones de lo que hago con mi vida?-dije mirándola, con rabia. -¿No te das cuenta? Pierdes el tiempo, no la volverás a ver, eres Justin Bieber, ¿qué esperas?- dijo negando con la cabeza. No le contesté, cerré de un portazo la puerta del coche, arranqué y me limité a conducir. Esta vez no conducía yo, conducía mi rabia, la electricidad que había invadido mi cuerpo, estaba nervioso, no tenía las ideas claras, todo esto es, asqueroso. Minutos más tarde llegué a su casa, esperé unos minutos dentro del coche, meditando, estaba muy nervioso, las piernas me temblaban. Respiré hondo, sonreí y bajé del coche, mis pasos marcaban, el principio del final, porque cuando esta noche de a su fin, todo habrá terminado. Llego a la puerta, se oyen risas, con mi dedo aprieto el timbre, mi corazón late fuertemente. -Hola-abre y sonríe una chica mirándome- mi nombre es Karol-dijo algo ¿nerviosa? Yo alcé una ceja, sonreí y me tiré de la chaqueta, me aclaré la garganta y dije. -Hola, yo, yo soy Justin, -reí- ¿está __(TN)__ ahí? Dije tragando saliva. -Querrás decir la princesa __(TN)__ ¿no?-dijo riendo. -Exacto-dije sonriendo. -No le queda nada, ya baja, entra, no te quedes ahí-dijo riendo. Ella subió, empecé a jugar con mis manos, más tarde con el pañuelo del traje, se escucharon risas, olía a ella, eché el último vistazo a la casa cuando me percaté de que estaba bajando por las escaleras, levanté mi mirada, estaba preciosa, realmente preciosa, yo abrí muchos los ojos y no paraba de mirarla, me levanté de mi sitio y me acerqué un poco más, parecía una princesa, era mi princesa, y aún no podía creer que este era el último día para los dos, no quería estropearlo, no se lo iba a decir, tenía un recogido precioso, los pendientes le favorecían muchísimo, el vestido, le hacía un cuerpo precioso, curvoso y llamativo, los zapatos de tacón la hacían más alta y atractiva, no es ella, me niego a perderla, no quiero, pestañeé dos veces, le sonreí y con un pequeño nudo en la garganta dije: -Es...estás, estás preciosa princesa. -Tu también principe, pero no tenías que haberme traído nada.-se sonrojó, hacía tiempo que no la veía así, tan ¿contenta? No lo sé, pero sé que esto me lo va a hacer todo muchísimo más difícil. Ella caminó hacia la puerta moviendo sus caderas, yo seguía mirándola, me acerqué, tiré de su mano y le levanté el mentón, ella rió, me causó gracia y también me reí, le robé un pequeño besito. -Prometeme , que pase lo que pase, siempre sonreirás de la misma manera en la que lo haces ahora.-dije yo, mirándola a los ojos. -Solo, si estás a mi lado.-PUM, en un segundo sentí todo caerse justo arriba de mi. Me acerqué a sus labio y la besé, agarré su mano y caminamos hacia el coche, le abrí la puerta y esperé a que se acomodara, yo volví a mi asiento y me senté. -Princesa, hoy estás realmente, increíble. -Esto es gracias a tí.-dijo, me miró y sonrió. Cada segundo que pasaba estaba más seguro de que esto iba a ser un gran golpe, una gran caída, esto iba a marcarnos. La miré y le sonreí. -Justin, hoy, mientras estaba en internet, vi algo de MY WORLD TOUR, ¿qué es eso?-dijo ella, mientras fruncía el ceño y me miraba atónita. Yo me quedé en blanco, no sabía que responder, acaba de volver a tropezar, mi corazón ahora, iba muchísimo más rápido, todo, se había vuelto en mi contra.
Novela ·NEVER GIVE UP· Capitulo 21.
Capitulo 21: _______NARRA JUSTIN______ Todo es perfecto, estamos justo en el borde del lago, estoy apoyado sobre sus piernas y ella me acaricia el pelo suavemente, acabo de exhalar uno de esos suspiros que dicen mucho, uno de esos que dicen que te sientes bien, un suspiro que expulsa todas tus malas energías para convertirlas en buenas, ella, en cambio sonríe mirándome mientras lo hago, le devuelvo la sonrisa, me incorporo lentamente y le beso en la mejilla. Ella vuelve a sonreír, se levanta sin decir nada y camina hacia el lago, introduce sus pies en él, suelta un 'Argsh' por la temperatura del lago y se sienta en el borde, mirando las miles de gotas que caen por la cascada. Yo la observo detenidamente, su pelo, su nariz, sus ojos, su boca, su cuerpo, ella, ella. Se ve tan débil, tan frágil, pero sé que es fuerte, ha podido con lo que cualquier ser humano no podría, ha podido con lo imposible y ha luchado con lo inluchable. -¿Me querrás hasta el fin de mi vida?-grité yo, sonriendo, ella volteó y me miró. -No, -dijo negando,elevando la voz, mientras sonreía- te querré hasta el final de la mía. Los días han pasado, me atrevería a decir que han pasado semanas, todo sigue igual, (TN) es la niña más imperfecta que puede existir, ¿pero sabéis que? La amo así, con cada uno de sus defectos, y he aprendido algo, que amas a una persona cuando sabes mirar más allá de sus defectos, cuando sabes mirar más allá de una lágrima de preocupación, amar es saber mirar mas allá, es saber ver lo invisible. Bajo las escaleras y sonrío, me dirijo a la cocina, abro el frigorífico en busca de algún refresco, zumo de naranja, no hay nada mejor para empezar el día. Mi móvil empieza ha vibrar, no muy buena señal, algo me dice que esta llamada cambiará las cosas, de nuevo (TN) se me viene a la mente, dudo en cogerlo o no, dejo el zumo en la mesa y rebusco entre mi bolsillo. ''Mamá''- Coger. -¡Justin! Por fin te dignas a hablar con tu madre- dice ella con un tono bastante comprometedor. -Mamá, lo siento, he estado algo... algo ocupado-dije tocando mi pelo. -Justin, ¿has preparado las cosas? -¿Qué cosas?-dije esta vez yo, mientras mi corazón poco a poco iba acelerando. -¡Justin! ¿Cómo que qué cosas? ¡DENTRO DE DOS DÍAS EMPIEZAS LA GIRA MUNDIAL!- dijo alzando la voz por el otro lado del teléfono. En ese momento, solo se me vino a la mente una persona, ella, la razón de todos mis olvidos. _____FLASHBACK____ -Tranquila princesa, no volverá a pasar nada más-dijo abrazándome- yo estaré a tu lado siempre, ¿me escuchas? Siempre. _____FIN DEL FLASHBACK____ -Pero...-fue la única palabra que podía pronunciar, mi mente totalmente estaba en blanco, ella se había apoderado de todos mis pensamientos, mamá me estaba hablando por la otra línea del teléfono, no la estaba escuchando, en estos momentos querría dejar todo de lado e irme junto a ella; correr agarrados de la mano, alejarme de todo, donde nadie me pueda encontrar. -¡JUSTIN!- volvió a gritar mamá. -Sí mamá, estaré preparado, adiós, te quiero.-me limité a decir, le colgué, en estos momentos no tenía ganas de nada, apagué el móvil y volví a subir las escaleras, la impotencia me recorría cada parte de mi cuerpo, el miedo me encerraba una vez más, tenía miedo de perderla, de perder todo lo que un día logré construir. Por unos momentos quería desconectar del mundo, quería descargar todas las malas energías y todas las malas sensaciones que estaban recorriendo mi cuerpo. Intento gritar, pero un gran nudo en la garganta me lo impide, mis ojos no tardan en brillar, los noto húmedos, y de ellos van saliendo lágrimas. La rabia me invade, entro en la habitación y doy un gran portazo, solo me tiro la cama y me limito a llorar, como cuando era pequeño y tenía miedo. Como cuando era pequeño y papá solo venía a verme para discutir con mamá. Mientras lloro, los minutos pasan, decido levantarme y limpiarme las lágrimas, Justin, ¿qué esperabas? Me dije a mi mismo. Caminé hacia el ropero y saqué mi guitarra, aquella amiga que nunca me abandonaba en los momentos que más lo necesitaba, me senté en la silla, al lado de la ventana, aclaré mi voz y me dejé llevar. - Dicen que el odio se ha instalado, y que ya no podremos hablar de amor, antes de que me prohíban tus besos, dame el último abrazo. He estado persiguiendo un sueño que no quieren que se haga realidad pero cuando tomas mi mano entonces entiendo que esto está destinado a ser real. Porque cariño, cuando estás conmigo es como si llegara un ángel y me llevara al cielo, (como si me llevaras al cielo, cariño) porque cuando me miro en tus ojos o puedo estar mejor (no quiero que te vayas, oh no, de ninguna manera). Deja que vuele la música haremos nuestro baile, trae aquí a los incrédulos, a ellos no les importa en absoluto porque esta vida es demasiado larga y este amor demasiado fuerte, así que cariño, ten la seguridad de que nunca dejaré que te vayas. Tengo a mi chica favorita no siento ningún dolor, ningún miedo (ningún temor, ningún miedo) nada me preocupa en este mundo excepto que estés aquí, (que estés aquí, que estés aquí) hay un momento que he estado persiguiendo y al final lo atrapé en este lugar...(en este lugar, en este lugar).- Y por un momento, me ha parecido notar su presencia, giro mi vista, y no me he equivocado, un gran nudo se forma en mi garganta. -No pares, sigue, me encanta.-se limita a decir ella mientras me sonríe. Y así lo hago, vuelvo a cerrar mis ojos y a dejarme llevar, vuelvo a ser yo por unos momentos, vuelvo a ser Kidrauhl. Exhalo un suspiro y la miro, mientras intento forzar una sonrisa. -Cariño, no hay dudas ni reservas para seguir arriesgándonos. Oh no, porque es como si llegara un ángel y me llevara al cielo, como si me llevaras al cielo, nena porque cuando me miro en tus ojos no puedo estar mejor (no quiero que te vayas, oh no, de ninguna manera). Deja que vuele la música haremos nuestro baile, trae aquí a los incrédulos, a ellos no les importa en absoluto porque esta vida es demasiado larga y este amor demasiado fuerte, así que niña, ten la seguridad de que nunca dejaré que te vayas.Es como si llegara un ángel y me llevara al cielo, (como si me llevaras al cielo, nena) porque cuando me miro en tus ojos no puedo estar mejor no quiero que te vayas, oh no, de ninguna manera. Toma mi mano, vamos a bailar, mira mis pies, sígueme, no te asustes, cariño, estoy aquí si no lo sabías esto es amor.Deja que vuele la música haremos nuestro baile, trae aquí a los incrédulos, a ellos no les importa en absoluto porque esta vida es demasiado larga y este amor demasiado fuerte, así que cariño, ten la seguridad de que nunca dejaré que te vayas. Así que no tengas miedo, no te preocupes por nada estoy aquí, a tu lado nunca dejaré que te vayas) no derramaré una lágrima, cuando me necesites estaré aquí nunca dejaré que te vayas. Oh no, oh no, nunca dejaré que te vayas, oh no, oh no, nunca dejaré que te vayas... Sus ojos se tiñeron de un color brillante, un color que llenaba a cualquier persona, no tardaron en mojarse, corrió hacia mi y me abrazó fuertemente, yo le devolví el abrazo . Solté una pequeña lágrima que no tardó en bajar por mi mejilla, hasta caer al suelo y desaparecer. Nos separamos y nos miramos a los ojos, ella acarició mi mejilla, se dio cuenta de que estaba húmeda, y antes de que pudiera articular palabra le puse mi dedo sobre sus labios. -shh- dije yo, giré mi vista hasta sus labios y no obstante no tardé en volver a enredarme en ellos, lentamente, sin prisas, me he vuelto adicto a ella, su olor, sus labios, su sonrisa, su manera tan increíble de hacerme sonreír, de hacerme feliz. Pero un viento ha venido, y se la llevará lejos, donde yo no la pueda ver, y le haré daño, y me arrepentiré toda mi vida, y sufriré y tendré que callar verdades, tendré que seguir luchando, tendré que amar en silencio, porque sí Justin, esto lo has elegido tú. -Princesa- dije cuando nos separamos, ella elevó las cejas en señal de asentimiento. -Esta noche, quiero que te pongas increíblemente preciosa, ya se que es imposible serlo más, pero, esta noche, serás una princesa-puso una cara rara, reí al ver su gesto, sentí un pinchazo, el nudo volvió a la garganta, esta noche sería la última vez, la última vez que sentiría su risa, sus labios, la última vez que sentiría sus manos rozando las mías, sería la ultima vez que oliese su olor tan especial, sería la ultima vez que me picara con sus tonterías, la ultima vez que la sentiría cerca. -¿Increíblemente preciosa?-rió-eso es imposible. -Tienes razón, dije moviendo un mechón de su pelo hasta detrás de su oreja.- No se puede ser más preciosa-dije robándole un pequeño besito. -Tonto-dijo y rió, yo forcé una pequeña sonrisa. -¿Sabes?-dijo ella- nunca te había oído tocar la guitarra, pero no me arrepiento de haberlo echo, me has echo sentir algo mágico, he recordado cuando tú no estabas a mi lado y- tragó saliva- todo era más difícil, no quiero que te vayas jamás de mi lado. Jamás- entonces sentí como todo se venía abajo, no sabía que decir, las palabras se habían esfumado, me sentía vacío, tenía ganas de dejarlo todo, de bajarme del tren de la vida, tenía ganas de correr y dejarlo todo atrás, quería volver al pasado, no quiero perderla, quiero tenerla a mi lado, quiero sonreír y que ella sea el motivo de mi sonrisa, quiero ser feliz por su causa. Quiero vivir con ella caminando de mi lado. Unos pasos de tacón se escuchaban acercarse a la habitación, ¡Selena!-dije en un susurro. Rápidamente miré al armario, le pegué un pequeño empujón, ella soltó un ¡aw bruto! -Lo siento princesa-dije en susurros y cerré la puerta del armario. -¡Justin! ¿Puedo pasar?-dijo Selena dando pequeños golpes en la puerta. -Ah, Selena, sisi claro- dije tocándome el pelo. -¿Tienes preparadas las cosas para pasado mañana? -Mmmm..sisi, claro.-dije nervioso, ella lo notó. -¿Te ocurre algo? -No no, ya sabes, lo normal. -Ah, bueno, pues si necesitas algo, estoy abajo ¿vale? -Claro, gracias Selena-dije sonriendo. -De nada cariño-se acercó a mi y me besó cerca de los labios, me tensé y cerré los ojos, rápidamente miré hacia el armario. -Que raro estás hoy-rió- bueno, me voy.-dijo haciendo un gesto con la mano. -Adiós sel...
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